Pachuca, Hgo., marzo 13, 2016
La influenza es una infección viral que llegó para quedarse y prueba de ello es que antes de la pandemia de 2009, en el año 1920 se registró la llamada epidemia española que mató a un gran número de personas. Se quieren entre 10 y 50 años para que el virus pueda cambiar de forma extrema y que su contagiosidad o su virulencia sea más grave.
En la pandemia del 2009 el virus que se presentó fue un virus que ya existía, que ya se conocía pero que cambio toda su estructura o su forma de infección, y se hizo más fácil y más grave el contagio en el sentido de infectar al paciente, asegura el neumólogo Alejandro Arreola Morales, adscrito en al Hospital Columba Rivera Osorio.
La influenza, que es una enfermedad infecciosa respiratoria que está causada por el virus influenza de los que existen tres tipos “A”, “B”, “C”; el tipo “B” es la que conocemos como estacional que da como la gripa típica de cada año.
“En tanto que el tipo “A” es un virus que se subdivide en diferentes categorías, de acuerdo a dos proteínas, la hemoglutinina que es la “H” que se le pone el primer apellido del virus y la neuroaminidasa que es la “N” que se le pone al otro apellido del virus, de tal forma que tenemos dos tipos de virus comunes cada año, el virus tipo AH1N1, y el tipo AH3N2, pero de esas “H” hay 18 tipos y de la N 11 tipos, entonces hagan las combinaciones que quieran, pero las que más han infectado cada año al humano son los tipos H1N1 y el H3N2”. Aunque la H1N1 es la de mayor virulencia, informó el médico especialista.
El año anterior dijo, por lo menos en el Hospital Columbra Rivera Osorio, no se registró ningún caso de H1N1.
Asegura que quizá la población se pregunta porque este año hay más personas afectadas por enfermedad tipo influenza (ETI), y la respuesta es que la sociedad se confió y no se vacunó, esto es fácil de determinar ya que la gran mayoría de los casos de personas que han sido atendidas por ETI no se han vacuna además que llevan alguna comorbilidad como obesidad, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma, cáncer, cardiopatías, diabetes “o alguna otra enfermedad sistémica que genera más riesgo que se infecte de influenza y que genera un tipo de influenza grave, por eso es que este año hemos tenido más influenza de todos los tipos”.
No haberse vacunado, tener alguna de esas comorbilidades y además automedicarse o no acudir al médico ante los primeros síntomas de ETI, como dolor de cabeza de inició súbito, fiebre superior de 38 grados y tos intensa que produce gran malestar, es lo complica los cuadros y puede llevar al paciente a un cuadro clínico grave que lo puede llevar a la muerte.
Reiteró que la vacuna es anual se aplica a partir de octubre y está enfocada precisamente a los grupos de riesgo ya mencionados en las comorbilidades, así como a niños de seis meses, personas con VIH, mayores de 50 años, personal médico y de salud entre otros.
En el ISSSTE Hidalgo, y por indicaciones del titular Jorge Islas Fuentes, se acude incluso a los sitios de trabajo de quienes son derechohabientes del Instituto para aplicarles la vacuna, pero desafortunadamente no se llega al cien por ciento de los derechohabientes en este caso los derechohabientes de grupos de riego, deben hacer la parte que les corresponde y acudir a recibir la dosis correspondiente del biológico el cual cubre los tres tipos de virus.
Finalmente reiteró que la influenza llegó para quedarse y la población debe ser corresponsable en el cuidado de su salud, y nunca olvidar que las medidas preventivas como el lavado de manos, el toser en el ángulo interno del codo, desinfectar superficies de trabajo, teclado, mouse y calculadoras; en el caso de los niños los juguetes que utilicen, también son hábitos que deben observar de forma permanente.
