Comprensión de la Economía Social y Solidaria
M.E.R Joaquín García Galván.-
«Es un concepto que designa a las empresas y organizaciones, especialmente las cooperativas, sociedades mutuales, asociaciones, fundaciones y empresas sociales, las cuales tienen la característica específica de producir bienes, servicios y conocimiento, a la vez que persiguen objetivos tanto sociales como económicos, y promueven la solidaridad» Conferencia Regional de la OIT sobre Economía Social, octubre 2009
Los desafíos actuales —el desempleo, la exclusión, la desigualdad, la pobreza y el calentamiento global— nos obligan a reconsiderar la forma en la que hacemos negocios. Ni los mercados convencionales ni el Estado cubren eficazmente las necesidades de grandes grupos de la sociedad en los países industrializados y en desarrollo. Un producto de este replanteamiento ha sido el surgimiento de empresas sociales —negocios cuyos objetivos son principalmente sociales— como parte de una creciente «economía social y solidaria» que también incluye las actividades económicas de las organizaciones voluntarias y comunitarias. Las empresas de la economía social y solidaria complementan otros canales de suministro de bienes y servicios. Esto incluye la reinserción de los grupos vulnerables en la vida laboral y la extensión de la protección social.
Sin dejar de ser un movimiento de base, la economía social y solidaria ha crecido en las últimas décadas para convertirse en un importante factor económico en muchas partes del mundo y, cada vez más, en un ámbito de formulación de políticas públicas. Se estima, por ejemplo, que las cooperativas, incluidas las mutualidades de los sectores de los seguros y las finanzas, emplean a más de 100 millones de personas en todo el mundo. Se calcula que en Europa alrededor del 10 por ciento de las empresas y el 6 por ciento del empleo total se encuentra dentro de la economía social y solidaria.
La ESS comprende formas específicas de empresas y organizaciones. Las cooperativas, sociedades mutuales, asociaciones y empresas sociales son los tipos más comunes pero no los únicos. Es un grupo de interlocutores dinámico y en evolución en el cual todos promueven y administran organizaciones económicas centradas en las personas.
El término “economía social” es a menudo presentado como utilizado por primera vez a finales del siglo XIX para describir las asociaciones voluntarias y de autoayuda establecidas por los trabajadores para enfrentar las consecuencias de
la extensión del capitalismo industrial. El término fue redescubierto en la década de 1970 cuando los movimientos cooperativos, mutuales y asociativos franceses redescubrieron sus rasgos comunes y fortalecieron su reconocimiento institucional (Defourny & Develtere, 2009).
La economía social está clásicamente asociada con las cooperativas, las organizaciones mutuales y las asociaciones. Estas organizaciones comparten el objetivo de reunir a las organizaciones autónomas cuya meta es ofrecer un servicio a sus miembros o a la comunidad sin considerar las ganancias y que incorporan procesos democráticos de toma de decisiones a pesar de algunas diferencias en términos de la distribución de los beneficios (por ejemplo, las cooperativas permiten la distribución de los excedentes en efectivo a sus miembros mientras que las asociaciones y las sociedades mutuales lo prohíben).
En algunas partes del mundo (por ejemplo, Bélgica, Francia, Quebec y España), la economía social beneficia el reconocimiento político y económico entre los ministerios y la administración y apoya las políticas públicas. En estas regiones, la economía social agrupa a diversas organizaciones, incluyendo grandes bancos bien establecidos, organizaciones de seguros o agrícolas y, más recientemente, pequeñas iniciativas apoyadas o no por las políticas públicas.
Ventajas comparativas de la ESS
La ESS se caracteriza por diversas formas organizativas, dominios de actividades, enfoques, locaciones geográficas e incluso terminologías. Esta variedad a menudo dificulta obtener reconocimiento, no sólo para algunas OESS en sí mismas sino también para los interlocutores públicos y privados a escala local, nacional e internacional. Sin embargo, la ESS presenta varias ventajas comparativas para abordar los desafíos sociales, económicos y políticos en todo el mundo.
Cohesión social
Debido a que nuestras sociedades están en constante cambio, la cohesión social entre las personas y las comunidades a menudo está en peligro. Los programas de cohesión social se establecen en todas partes para crear o mantener los vínculos y un sentido de comunidad entre personas que comparten las mismas áreas de residencia, instalaciones comunes o destino.
A través de todos estos principios operativos, la ESS se basa en la cohesión social y contribuye a dicha cohesión. Como explica Jacques Defourny (1992), la cohesión social (o el reconocimiento de una identidad colectiva) es uno de los factores que hacen realidad la ESS. Es realmente debido a este sentido de colectivo que los grupos de personas deciden abordar los asuntos sociales y económicos a través de las organizaciones de economía social y solidaria. Además, la ESS genera cohesión social a través de sus principios de funcionamiento, sus propósitos sociales encaminados a beneficiar a los miembros y la comunidad y su impacto local.
Empoderamiento
El empoderamiento es un factor importante que permite a los individuos y las comunidades tener voz y ser representados. El empoderamiento puede crearse a través de una variedad de procesos y mecanismos. Es indudable que la participación y la membresía en las OESS contribuyen a un proceso de empoderamiento. Los miembros y usuarios ganan empoderamiento a través de su participación activa en el proceso participativo de toma de decisiones dentro de la organización y fuera de las organizaciones cuando están negociando con interlocutores externos. A escala colectiva, las Organizaciones de Economía Social y Solidaria (OESS) también contribuyen al proceso de empoderamiento de los individuos y las comunidades demostrando que todos los individuos pueden convertirse en interlocutores económicos y sociales activos y productivos.
Reconocimiento de una economía Plural
Existen diversos mecanismos que pueden lograr objetivos similares como la generación de empleo, protección social, bienestar, riqueza, innovación, atención, etcétera. La mayoría de las sociedades están compuestas de una pluralidad de interlocutores públicos y privados que pueden estar orientados hacia acciones lucrativas o no lucrativas.
La protección social es un buen ejemplo de cómo diferentes mecanismos provistos por diferentes interlocutores y basados en diferentes razonamientos podrían articularse para lograr un objetivo común, por ejemplo, la protección social para todos. En muchos países, estos mecanismos coexisten sin estar vinculados entre sí, pero podrían articularse a través de un proceso de redistribución para finalmente ofrecer lo que la OIT denomina piso de protección social.
Conclusiones Fundamentales
* La ESS se refiere a formas específicas de organizaciones y empresas. Los tipos más comunes son las cooperativas, sociedades mutuales, asociaciones, organizaciones comunitarias, empresas sociales y algunas fundaciones. La ESS es en realidad un grupo de organizaciones dinámico y en evolución.
* Las OESS comparten rasgos comunes que las diferencian de la economía pública y de la economía lucrativa convencional. Todas persiguen objetivos sociales y económicos combinados y comparten principios operativos específicos basados en la participación, solidaridad, innovación, incorporación voluntaria y propiedad colectiva.
* El término economía social y solidaria no se utiliza solamente para agrupar a estas realidades. La economía social, economía solidaria, economía popular y organizaciones no lucrativas son conceptos relacionados. Todos
tienen ciertos orígenes geográficos y antecedentes teóricos y enfatizan dimensiones particulares de esta forma económica.
* Las OESS ofrecen muchas ventajas comparativas para abordar los retos sociales, económicos y políticos en todo el mundo, incluyendo la cohesión social, el empoderamiento y el reconocimiento de una economía plural.
Pensar Globalmente, Actuar Localmente.