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Sin polinizadores, el mundo afectaría su diversidad alimentaria

Ciudad de México, 17 de septiembre del 2024.- Gracias a ellos son posibles cultivos clave para la dieta mexicana, como jitomate, chiles, frijoles y aguacate: Mauricio Quesada, del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad y la Escuela Nacional de Estudios Superiores, campus Morelia.

Te imaginas un mundo sin guacamole? ¿O sin chocolate? ¿Qué tal uno sin salsas y frijoles en la mesa? Actualmente las abejas y otros polinizadores en nuestro medio ambiente se encuentran amenazados y de su existencia dependen cultivos clave para la dieta mexicana, como jitomate, chile, tomate, frijoles, calabazas, cacao, aguacate, café, guayaba, ciruelas, papaya, durazno, manzana, pera, pimiento, sandía, melón, pepino, fresa, zarzamora, tejocote, higo, nuez de la india, mango, naranja, entre otros. Imagina tu vida sin todo eso en tu hogar. Y sin la existencia de algunas flores, como las orquídeas.

“Los polinizadores son cruciales en la reproducción sexual de las plantas en condiciones naturales”, así lo afirma Mauricio Quesada Avendaño, del Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad y coordinador del Laboratorio Nacional de Análisis y Síntesis Ecológica de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) Morelia. “Existen más o menos unas 300,000 angiospermas, es decir, plantas con flor en el planeta. Éstas evolucionaron para producir frutos y semillas a partir de la reproducción sexual. Esencialmente, el polen es el que lleva las células sexuales que fertilizan los óvulos de la función femenina de las plantas y a partir de ahí se producen los frutos y las semillas”, añadió el científico. “Prácticamente la mayoría de estas 300 mil especies de plantas con flor requieren de polinizadores como vectores esenciales en este proceso: transportan el polen, es decir, la función masculina la depositan sobre la femenina de las flores y luego ocurre la fertilización. Lo anterior mantiene su diversidad genética en el planeta, lo cual resulta ser algo muy importante porque permite la regeneración de nuestros ecosistemas”, señaló el investigador. ¿Quiénes son? Si bien es cierto que las abejas y sus diferentes especies son los polinizadores más populares del planeta, sobre todo en los últimos años cuando se han impulsado acciones en favor de su preservación frente a las distintas amenazas que enfrentan, no son las únicas que tienen esa función dentro de un ecosistema sano.

“Las abejas son importantes en ciertos ecosistemas, pero no se puede menospreciar la polinización de muchos otros grupos”, argumentó Quesada Avendaño, quien abundó sobre otras especies que desempeñan funciones similares. “Las moscas son un grupo muy importante de polinizadores, también las mariposas, los colibríes, los murciélagos y las polillas nocturnas. Hay escarabajos que igual hacen esa función en ciertos grupos de plantas, como los alcatraces y las palmeras, por ejemplo. De manera tal que hay una gran diversidad de polinizadores sobre el planeta que están especializados en diferentes grupos de plantas. Por ello, no sólo debemos considerar a las abejas como los más importantes, sino pensar en ellos como un grupo amplio”. Es un punto que también ha buscado recalcar la Organización Mundial de las Naciones Unidas, como lo subrayaron el pasado 20 de mayo durante el Día Mundial de las Abejas (https://www.un.org/es/observances/bee-day/background#:~:text=Los%20monocultivos %2C%20los%20pesticidas%20y,amenaza %20inmediata%20para%20la%20nutrici%C3%B3n.).

“La mayoría de las 25,000 a 30,000 especies de abejas (Hymenoptera: apidae) son polinizadoras eficaces y, junto con las polillas, las moscas, las avispas, los escarabajos y las mariposas, constituyen la mayoría de las especies polinizadoras. Sin embargo, existen muchos más. La gran variedad de polinizadores y sistemas de polinización es sorprendente; de hecho, hay algunos vertebrados, como los murciélagos, mamíferos no voladores (como varias especies de roedores, los lémures, las ardillas comunes, los olingos y los kinkajúes) y aves (colibríes, suimangas, mieleros y algunas especies de loros)”, se especifica en la página de la Organización de las Naciones Unidas. “Un mundo sin polinizadores supondría un mundo sin diversidad alimentaria, sin arándanos, café, chocolate, pepinos ni muchos otros alimentos. También sirven para alertarnos acerca de los nuevos riesgos ambientales, indicando la salud de los ecosistemas locales”, advierte el organismo internacional.

con información de https://www.unam.mx/

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