Pachuca de Soto, Hgo., 19 de julio de 2024. La noche del jueves, durante la última visita de inspección a Hidalgo que realizó el titular de la Secretaría de Turismo del Gobierno de México, Miguel Torruco Marqués, junto con la en encargada de la política turística en el estado, Elizabeth Quintanar Gómez, se reveló que Peña del Aire, en el municipio de Huasca de Ocampo, recibirá la certificación como primer Parque Internacional de Cielo Oscuro en el país.
“A lo largo de esta administración, encabezada por el presidente, Andrés Manuel López Obrador, se ha mantenido una intensa actividad en la entidad hidalguense, fortaleciendo de esta manera al Pueblo Mágico de Huasca de Ocampo, entre otros de esta entidad, en cumplimiento de la instrucción de hacer del turismo una herramienta de reconciliación social”, indicó el servidor público.
Por su parte, Quintanar Gómez señaló que, durante este proceso de certificación, se han llevado a cabo diversas actividades, convenios y eventos encaminados a la obtención de la misma.
“Hidalgo es un crisol de proporciones inimaginables en riqueza natural, hemos sido privilegiados con espacios únicos e irrepetibles, en comparación con cualquier punto cardinal de nuestro planeta”, expuso.
Dijo que, desde el gobierno del estado, encabezado por Julio Menchaca Salazar, y a través de la Secretaría de Turismo estatal, se han sentado las bases de un proyecto que es necesario para rescatar y salvaguardar un tesoro preciado en el estado: el entorno natural.
La delegación mexicana de DarkSky, en conjunto con los gobiernos federal y estatal, trabajó arduamente para lograr este nombramiento que colocará a Hidalgo en el mapa mundial, ya que será parte de los 125 parques en el orbe que cuenta con el distintivo.
En ese sentido, la secretaria indicó que “DarkSky es la autoridad internacional en materia de contaminación lumínica, dedicada a proteger los cielos nocturnos en todo el mundo desde 1988. Su iniciativa más reconocida y exitosa es el Programa de Parques de Cielo Oscuro, cuyo principal objetivo es la preservación de las noches estrelladas frente a la contaminación lumínica”.
Ante el uso excesivo e ineficiente de la iluminación artificial, la preservación de cielos oscuros es de gran importancia para las generaciones futuras, además de ser un tesoro natural de incalculable valor que reconecta a las personas con el universo.
