Crece la presión sobre Putin por el fracaso de una «guerra relámpago»
Moscú, 14 de septiembre del 2022.- El monótono reporte cotidiano de éxitos militares que hizo ayer el vocero del ministerio ruso de Defensa, general Igor Konashenkov, no convenció ni a los seguidores más leales del Kremlin, como son los diputados de la Duma, subordinada por completo al Ejecutivo, donde el líder del Partido Comunista, Gennadi Ziuganov, segunda bancada formalmente de oposición tolerada, pidió una “movilización general” para poder ganar –afirmó sin temer las consecuencias por pronunciar la palabra prohibida– “esta guerra” que, en su opinión, “no es ninguna operación militar especial”.
Dimitri Peskov, portavoz de la presidencia rusa, no tardó en rechazar la petición de Ziuganov al subrayar que “no habrá un llamado a filas” de todos los rusos de entre 18 y 60 años de edad, que es algo que preocupa mucho en esta sociedad –a la que las autoridades han hecho creer que lo que ocurre del otro lado de la frontera es “una operación militar especial” para “desmilitarizar” y “desnazificar” Ucrania– y que, de llevarse a cabo, podría derivar en un imprevisible estallido de protesta contra el presidente Vladimir Putin.
Ziuganov preguntó a sus compañeros legisladores: “¿En qué se diferencia una operación militar especial de una guerra? En que es posible detener la operación militar en cualquier momento, a diferencia de una guerra, que no puedes detenerla cuando quieras y termina en victoria o en derrota”.
Y añadió sin pelos en la lengua: “hay una guerra y no tenemos derecho a perderla. Necesitamos una movilización general en el país, necesitamos leyes completamente diferentes”.
Peskov declaró a la prensa que lo dicho por Ziuganov es una muestra de “pluralismo” en Rusia, al tiempo que las agencias noticiosas del Estado informaron –tal vez para escarmiento de todos los inconformes– que la policía detuvo a un ciudadano que, al votar en las elecciones municipales del domingo pasado, escribió en su boleta: ¡No a la guerra!
El inamovible dirigente comunista desde hace 29 años se sumó a las voces nacionalistas y belicistas que reaccionaron con indignación cuando el sábado anterior el ministerio de Defensa anunció un “reagrupamiento ordenado” de las tropas que tenía en la región ucrania de Járkov, repliegue que no dudaron en calificar de “desastre imperdonable”, que acabó con el llamado “frente de Izium” en el estratégico flanco norte.
Ante las imágenes que circulan en redes sociales de soldados hechos prisioneros o muertos, así como de numerosos tanques, cañones, unidades de misiles, depósitos de proyectiles destruidos o abandonados intactos en lo que tiene todos los visos de caótica huida para evitar que el ejército ucranio cerrara el cerco, Vladimir Soloviov, el más belicista de los conductores de programas de debates, en realidad monólogos contra el “régimen nazi” de Ucrania, llegó a decir que “varios generales” rusos, por ineptos, merecen “ser fusilados”.
En la televisión pública rusa, principal escaparate de la propaganda oficial, se exigió el cese inmediato de los responsables militares y de los asesores políticos que, coinciden en señalar los habituales participantes, “engañaron al presidente Vladimir Putin” haciéndole creer que la campaña en Ucrania sería un paseo y acabaría en dos o tres días al caer Kiev, como se suponía, a finales de febrero anterior.
Con información de: https://www.jornada.com.mx/