Adecuados hábitos higiénicos evitan sudoración excesiva: IMSS
Pachuca, Hidalgo, 20 de septiembre 2015
- La sudoración puede presentarse también por estrés, pero su afectación es momentánea
La sudoración corporal es una molestia menor para la mayoría de las personas, sin embargo, cuando es acompañada de olor en axilas, manos y pies, puede convertirse en un verdadero problema personal, señaló la coordinadora de Enfermería en Salud Pública del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Delegación Hidalgo, Carmen Oropeza Cruz.
De manera normal el ser humano transpira en mayor o menor medida debido a que es homeotermo, es decir regula su temperatura corporal. Es así que la producción de sudor es la respuesta normal del cuerpo a la acumulación de calor, lo cual varía de una persona a otra. Por ejemplo, muchas mujeres sudan con más intensidad durante la menopausia.
Algunos de los factores que influyen en este proceso son la ingesta de bebidas, sobre todo las que contienen alcohol o cafeína y las bebidas calientes, que pueden incrementar transitoriamente sudoración. De igual manera, el nerviosismo, estrés y la ingesta de alimentos picantes.
Carmen Oropeza explicó que el sudor humano es inodoro y mediante él se elimina agua, aunque no necesariamente debe tener un olor desagradable, la mayoría de las veces es inevitable, ya que en el proceso también intervienen bacterias en descomposición.
Las áreas donde más se presenta sudoración y que están menos expuestas a la luz son lugares donde las bacterias se reproducen con más rapidez, y si dichas áreas tienen vellosidad, el problema es mayor. En las regiones del cuerpo con poca ventilación, como es el caso de los pies, pueden proliferar bacterias que provocan malos olores.
Cabe señalar que se pueden distinguir otros tipos de sudoración, como el sudor frío, que es usualmente la respuesta del organismo a una enfermedad grave, ansiedad o dolor intenso y la persona debe recibir atención médica de inmediato. En tanto, el sudor por estrés es emocional y particularmente intenso en las axilas, las palmas de las manos y los pies.
Recomendó seguir algunos sencillos consejos para evitar el mal olor, principalmente ducharse cuando menos una vez por día, además, consumir por los menos dos litros de agua al día, para que las toxinas se eliminen más fácilmente sobre todo a través de la orina y así disminuir la traspiración y por tanto, el mal olor.
En cuanto a la vestimenta, se recomienda utilizar ropa de fibras naturales como algodón, lino o lana. De igual manera, es imprescindible cambiar de ropa interior como exterior diariamente.
Respecto a la alimentación, debe ser rica en proteínas con frutas y verduras, pues las toxinas de los alimentos se eliminan a través del sudor.