Análisis | Por: Pedro Luis Noble Monterrubio | La Diez del Salón de la Fama del Fútbol
La tarde del pasado martes se llevó a cabo la décima edición de la Investidura del Salón de la Fama del Fútbol Mexicano e Internacional avalado por la Federación Internacional de Futbol Asociación, (FIFA), con sede aquí en Pachuca. Después de dos años en los que derivado de la pandemia sanitaria por el COVID-19 se vieron interrumpidas las galas anuales que reconocen a lo mejor del balompié nacional y mundial, es que afortunadamente se volvió a vibrar con el culto a aquellas leyendas que se encuentran en el olimpo de este deporte, sin duda el más famoso del orbe.
Fue de notarse el trabajo arduo del Comité de Honor de este Salón de la Fama dirigido por Antonio Moreno para estructurar una logística aún más compleja de la que ordinariamente caracteriza a cada ceremonia de investidura, en función de que para esta edición del 2022, se garantizaron todos los protocolos sanitarios para salvaguardar a las y los asistentes a este evento que se ha constituido ya como una parada obligada en la agenda anual de la familia futbolística de México y del extranjero.
Esta generación de futbolistas galardonada fue encuadrada por los organizadores en una temática para el evento denominada: “La Diez”, haciendo un homenaje al histórico número 10 que en este deporte le es otorgado a aquella estrella de un equipo, ya sea a nivel de clubes o de selecciones, que destaca por su desempeño en el campo, su nivel notable de juego y su liderazgo para arropar a la alineación que compite en un cotejo.
A lo largo de la historia del futbol podremos encontrar a auténticos íconos que con ese dorsal han conquistado partidos y campeonatos de todo tipo. Así, nombres como el de Pelé, Diego Armando Maradona, Johan Cruyff, Alfredo Di Stéfano, Ferenc Puskas, Franz Beckenbauer y en años recientes Zinedine Zidane, Cristiano Ronaldo, Lionel Messi o Kylian Mbappé han recibido la enorme responsabilidad de como coloquialmente se dice:“cargarse a sus equipos a cuestas” y guiarlos hacia el triunfo una competencia tras otra. “La Diez” fue en sí, un elemento consonante entre el mito que engloba a este número y a como se precisó anteriormente: la décima edición de estos reconocimientos futbolísticos.
Fue de esta de manera que los nombres de exjugadores míticos como el delantero español Raúl González, los campeones mundiales, el defensa italiano Fabio Cannavaro y los brasileños Roberto Carlos, defensa lateral, Didi y Ronaldinho, ambos centrocampistas fueron encumbrados como investidos internacionales; en tanto que en el rubro nacional, fueron los porteros mundialistas Oswaldo Sánchez y Pablo Larios; los decanos Jesús del Muro y Vicente Pereda, así como el famoso extremo brasileño Antonio Carlos Santos, figura del Club América, los electos mediante votación por parte del Comité electivo integrado por periodistas mexicanos y extranjeros.
Mención aparte, son los nombres de Pia Sundhage, exjugadora profesional sueca y actual entrenadora de la Selección Nacional Femenil de Brasil y de Maribel Domínguez, también exjugadora del mayor nivel de competencia orgullosamente hidalguense quien fue mundialista y competidora olímpica y hoy es actual directora técnica de la Selección Nacional Femenil Sub – 20 de nuestro país. Ambas fueron galardonadas para hacerse de un lugar en este Salón de la Fama en su rama femenil.
Esta iniciativa del Grupo Pachuca encabezado por Don Jesús Martínez Patiño, respaldado por Martín Peláez, Pedro Cedillo, Armando Martínez, Jesús Martínez hijo y el propio Antonio Moreno, ha sido reconocida por la FIFA y la Federación Mexicana de Fútbol, acción que contrasta con las conductas violentas de algunos pseudoaficionados que solo buscan aterrorizar a la verdadera afición. Así, muchos buenos y antiguos aficionados nos pudimos saludar en esa ceremonia de la industria del futbol.
Hidalgo es orgullosamente sede de este recinto que inmortaliza a la historia del futbol. Con ello se exaltan valores como la paz, el orden, la disciplina, la unidad, el reconocimiento, el respeto, la competitividad y la no discriminación ni las agresiones. Pachuca, cuna del fútbol mexicano y crisol de la memoria de lo mejor del futbol mundial.