Exigen eliminación de violencia de género en diversas partes del mundo
26 de noviembre del 2021.- Mujeres de América Latina, España y Turquía se manifestaron este jueves en rechazo a la violencia machista al conmemorarse el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, al tiempo que el secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, advirtió que ”la violencia contra las mujeres y niñas es un crimen aborrecible y también una emergencia de salud pública”.
Guterres tuiteó que es “el momento de redoblar esfuerzos para todos juntos eliminar de cara a 2030 ese problema generalizado de derechos humanos”.
Precisó que nuevos datos muestran que en 13 países del mundo, dos de cada tres mujeres informaron que ellas o alguna conocida experimentaron una forma de violencia durante la pandemia de Covid-19.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) dijo que una de cada cinco mujeres desplazadas dentro de sus propios países han sufrido violencia sexual.
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, ratificó el compromiso de la isla contra las manifestaciones de violencia hacia mujeres y niñas, un asunto al que consideró de máxima prioridad para el país.
Cientos marcharon el jueves en Guatemala para exigir medidas que acaben con la violencia contra ellas. Reclamaron falta de acciones del ministro de Gobernación, Gendri Reyes, y apoyaron a la jueza Erika Aifán, a quien consideran perseguida por su fallos contra la corrupción.
Mostraron cárteles en los que denuncian que de enero a noviembre de 2020 han muerto en forma violenta 482 mujeres en todo el país.
“Queremos ser libres para jugar en paz”, decían algunas niñas en la marcha.
En las instalaciones del Organismo Judicial, las mujeres instalaron un altar con flores donde colocaron mantas en las que se lee: “No aparecemos muertas. Nos asesinan”.
Con vigilias y marchas con músiva, colectivos de mujeres rechazaron la noche del miércoles para protestar contra la violencia machista que se agudizó en Perú desde que se inició la pandemia del coronavirus hace 20 meses con más de un centenar de feminicidios y desapariciones.
Decenas de mujeres vestidas de blanco participaron en la vistosa marcha y en un simbólico cortejo fúnebre realizado en el populoso distrito de Villa El Salvador, al sur de Lima, exigiendo a todo pulmón el cese de la violencia de género en el país andino.
Con carteles donde se leía «132 feminicidios en lo que va del año», marcharon por las calles del distrito limeño.
Frente al Palacio de Justicia, un grupo de familiares de víctimas de esterilizaciones forzadas durante el gobierno del ex presidente Alberto Fujimori (1990-2000) reclamaron justicia y una indemnización en un caso que lleva más de dos décadas ante los tribunales.
«Las esterilizaciones forzadas y la impunidad también son violencia contra las mujeres», dijo a la Afp María Ysabel Cedano, del colectivo Defensa de los Derechos de la Mujer, quien calificó esa violencia «de pandemia».
«Los feminicidios, la violación sexual contra niñas se ha triplicado durante la pandemia en el caso de la violación y los embarazos producto de la violación en niñas», enfatizó Cedano.
Un colectivo de organizaciones femeninas de Bolivia exigió mayor presupuesto para combatir la violencia contra las mujeres, al denunciar que desde principios de año se registra un promedio de una violación cada hora.
En lo que va del año, «tenemos registrados en Bolivia 99 feminicidios, más de 40 mil casos de violencia de los cuales 7 mil son delitos de violencia sexual contra niñas y adolescentes: 23 casos cada día, aproximadamente un caso por hora», dijo la directora de la Coordinadora de la Mujer, Mónica Novillo.
Con banderas violeta y al grito de «ni una menos», miles se manifestaron en Madrid, capital de un país donde la lucha contra la violencia machista es una prioridad nacional.
Mascarillas, gorros y bufandas color violeta eran predominantes en la marcha por el centro madrileño, encabezada por una gran pancarta que leía: «#Hartas de las violencias machistas contra las mujeres. ¡Soluciones ya!».
Los participantes cantaban «No estamos todas, faltan las asesinadas» y «Ni una menos, vivas nos queremos», mientras, a sus espaldas, la fuente de Cibeles y los históricos edificios que la rodean estaban iluminados de color violeta.
La policía turca disparó gas lacrimógeno contra varios centenares de mujeres que manifestaban en Estambul para denunciar la violencia machista y la salida de Turquía de un tratado internacional que protege a las mujeres.
Las mujeres desplegaron banderines que decían «Combatiremos hasta que obtengamos lo que queremos», al exhortar al gobierno del presidente Recep Tayyip Erdogan a regresar a la Convención de Estambul.
Turquía se salió oficialmente en julio de ese tratado internacional, el primero que fija normas jurídicamente obligatorias para contener la violencia sexista.
Los conservadores del partido AKP en el poder afirman que el tratado impulsa la homosexualidad y amenaza la estructura familiar tradicional.
Un total de 345 mujeres han sido asesinadas desde el inicio del año en Turquía, según la plataforma We Will Stop Feminicide. En 2020 fueron ultimadas 410.
El papa Francisco pidió protección para las mujeres víctimas de violencia machista y calificó las distintas formas de maltrato como «una cobardía» y una «degradación para los hombres y para la humanidad».
El Acnur señaló que la pandemia del Covid-19 agravó la situación y, desde Afganistán y Colombia hasta República Democrática del Congo (RDC), las mujeres y niñas han sufrido «mayores estragos» a causa de los daños provocados por los conflictos, el desplazamiento y el coronavirus.
Desde marzo del año pasado, el Acnur alertó, que, a raíz de la pandemia, aumentó la violencia familiar, los matrimonios infantiles, la trata de personas, los abusos y la explotación sexual. Al mismo tiempo, se erosionaron logros que fueron difíciles de alcanzar en materia de igualdad de género.
«Abordar la violencia de género requiere de una respuesta conjunta en la que participen donantes, autoridades nacionales, socios humanitarios y sociedad civil, así como comunidades desplazadas forzosas, que incluyen mujeres, hombres, niñas y niños», señaló la agencia de Naciones Unidas.
Y Amnistía Internacional señaló que las mujeres venezolanas que migraron a otras naciones se encuentran entre las principales víctimas de violencia de género, por lo que los Estados deben garantizar su protección.
Con información de: AFP, Ap, Sputnik, Europa Press y Prensa Latina