El pez vela es uno de esos peces que al igual que el pez manta o el pez delfín, tiene su propio protagonismo que le hace algo diferente
El pez vela también comparte con el pez tótem general el significado de fertilidad, vida, pero su significado especial cuando aparece como tótem es añadir a estas cualidades la energía trepidante en grado supremo
En distancias cortas, el pez vela es uno de los peces más rápidos del mar. Puede llegar a alcanzar hasta 110 kms/hora gracias a su cuerpo hidrodinámico y musculoso. El pez vela sólo es superado en velocidad por el pez Mako (124 kms/hora).Ello nos habla de un tótem con una rapidez física increíble que nos alerta a ser rápidos de acción.
El pez vela tiene una cola rígida en forma de media luna, idónea para la velocidad y su alta aleta dorsal, o “vela”, corta el agua como con cuchillo. El hocico se estrecha hasta terminar en una punta muy afilada. Con sus tres metros de largo y sus cien kilos de peso es, además, uno de los animales más elegantes del océano, lo cual nos indica un tótem de belleza cuando aparece en la consciencia. El tótem del pez vela habla de elegancia, belleza y gracia.
El pez vela llega a alcanzar una velocidad de 30 metros por segundo lo que supone unos 109 kilómetros por hora. O sea que podría atravesar a lo largo una piscina olímpica en menos de dos segundos (una piscina olímpica mide 50 metros). Esta velocidad la logra gracias a un pedúnculo caudal muy poderoso, además se piensa que la prolongación de su mandíbula superior es una ayuda para hender las aguas al favorecer su hidrodinámica.
El pez vela con sus espectaculares saltos fuera del agua, sorprende verlo saltar como un delfín fuera del agua, de manera grácil y dinámica. Nos habla de un tótem dinámico, alegre, fuerte, sano y potente
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