En 10 años, cuatro partidos extintos se llevaron 5 mmdp.
- De los institutos creados en la última década, Nueva Alianza, Encuentro Social, el Socialdemócrata y Humanista ya no están en el panorama político; sólo Morena se ha mantenido y es la principal fuerza en la actualidad
El monto que esos institutos manejaron en la década que recién terminó es equiparable a, por ejemplo, los presupuestos que operarán este año secretarías de Estado tan importantes como Gobernación (5 mil 891 millones 930 mil pesos) o Turismo (5 mil 34 millones 491 mil pesos).
En tanto, Morena ha sido el fenómeno político del periodo de 2009 a 2019, pues en su primera participación electoral, en los comicios del año 2015 para seleccionar diputados federales, obtuvo 3.3 millones de votos y se ubicó como cuarta potencia, con 9.03% del conteo nacional.
Tres años después, en 2018 y en ese mismo nivel, alcanzó 20.4 millones también por sí solo; es decir, creció 17.1 millones y su peso es de 36% en los sufragios de legisladores.
Si se compara su primera participación en la renovación de la Cámara de Diputados en 2015 con la elección presidencial de 2018, en la que ganó el hoy presidente Andrés Manuel López Obrador, el crecimiento fue de 21.3 millones de sufragios.
En la coalición Juntos Haremos Historia —con los partidos del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES)— amplió la ventaja que ya tenía, por lo que ganó el Ejecutivo federal, la mayoría de las Cámaras Alta y Baja.
En ese mismo lapso desaparecieron cuatro partidos. De ellos, dos lo hicieron en 2018: el Partido Nueva Alianza (NA), con 13 años de existencia y fue el brazo electoral de la dirigente educativa Elba Esther Gordillo, hasta que rompieron; y Encuentro Social, de corte cristiano, aunque esos vínculos son rechazados por sus fundadores.
Ambos podrían regresar en este año. El primero convertido en el Partido México, pues ya ha cubierto tanto el número de afiliados como de asambleas exigidas por ley, al igual que el nuevo Partido Encuentro Solidario (PES) y estarán a revisión del Instituto Nacional Electoral (INE) para su eventual retorno a la vida partidista, con vigencia a partir del primero de julio próximo.
Nueva Alianza (2005-2018) alcanzó al morir políticamente sólo 1.3 millones de sufragios en las elecciones a diputados federales, 2.41% de los votos necesarios. Se quedó a 0.59% de conservar su registro, pues el umbral es de 3% de la votación válida en cualquiera de las elecciones: presidenciales o de legisladores.
PES también desapareció ese año, tras cuatro de existencia. En 2018 su máxima votación fue de 1.1 millones de sufragios, 2.51%, en la elección de diputados federales, por lo que le faltó casi medio punto, 0.49%.
Representación campesina que se despidió
En 2009 y 2015 también desaparecieron de la escena otros dos partidos, sin pena ni gloria: El Partido Socialdemócrata (PS) con cuatro años de vida —surgió en 2005 y sus antecesores fueron el Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina (PASC)— y el Partido AlternativaSocialdemócrata (PAS).
En los comicios de 2009 ese instituto tuvo 358 mil 708 votos, 1.03% de la votación del proceso para designar diputados. En ese entonces la Constitución establecía como umbral para conservar el registro 2%.
Su desaparición estuvo marcada por la disputa entre una ala campesina y otra de izquierda, que llegó a la violencia por los recursos.
Uno de sus exlíderes, Ignacio Irys, repitió con un partido nuevo, creado en 2014, el Humanista, que no subsistió a sus primeros comicios.
En ese caso, la disputa por el dinero y el registro la libró con el exfuncionario del gobierno de Vicente Fox, Javier Eduardo López, pugna que dificultó su primera participación electoral y que lo dejó como el partido menos preferido en 2015, con 847 mil 689 votos, 2.25% de los sufragios, pero la cifra fue insuficiente debido al nuevo umbral de 3% vigente a partir de esa etapa.
El Humanista intentó recuperar su registro en 2020, solicitó al INE iniciar el proceso, pero no avanzó y se desistió hace meses. En tanto, aunque hay un Partido Alternativa que ya ha completado el número de militantes y asambleas necesarios para ser instituto, éste está encabezado por el expriista César Augusto Santiago y no tiene relación con el anterior Socialdemócrata.
Con información de: https://www.eluniversal.com.mx/