Pachuca, Hidalgo, 13 de junio 2015
- Se debe realizar un autoexamen con la ayuda de un espejo manual y uno grande
- Es necesario revisar todo el cuerpo, incluso zonas poco expuestas al sol
Como sucede con distintos tipos de cánceres, la autoexploración y el monitoreo constante son piezas fundamentales para la detección y atención oportuna del cáncer de piel, por lo que conocer sus principales síntomas ayuda a estar al pendiente de ellos, manifestó la doctora Elvira Escobar Beristain, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en el estado Hidalgo.
Con motivo del Día de la Prevención del Cáncer de Piel, la coordinadora auxiliar de Salud Pública en la Delegación Hidalgo, señaló que la autoexploración se debería realizar de manera mensual, para lo que es indispensable conocer los lunares, imperfecciones, pecas y otras marcas en la piel para poder detectar cualquier cambio.
Señaló que esta enfermedad tiene dos variantes, el tipo melanoma, que regularmente es más agresivo y mortal, y el tipo no melanoma, que es más común, pero que detectándose a tiempo es altamente curable.
Este último puede manifestarse de distintas formas de marcas en la piel, sin embargo, la principal señal de aviso es la aparición de una nueva masa, mancha o protuberancia que esté creciendo en el trascurso de unos meses, uno o dos años o bien, una úlcera que no sane en el lapso de tres meses.
Hay que estar al pendiente de la presencia de áreas de color rojo, planas y escamosas, o de zonas cerosas, brillosas y traslucidas al relieve, de protuberancias crecientes de superficie áspera; de moretones que no se curan; de erupciones en glúteos, caderas o en la parte baja del abdomen, así como protuberancias debajo de la piel.
En tanto que los melanomas malignos son llamativos por su color negro y pueden aparecer en cualquier lugar del cuerpo, estos, si no se tratan a tiempo se extienden a otras partes, como ganglios linfáticos, pulmón, cerebro, huesos y generalmente llevan al paciente a la muerte.
Las medidas de protección son todas aquellas que eviten la exposición directa al sol o a los rayos ultravioleta, incluyendo los de tipo estético como los que emanan las camas de bronceado, utilizar ropa de manga larga, gorras, sombreros, sombrillas y protectores solares en sus distintas presentaciones.
La doctora Elvira Escobar recomendó hacerse el citado autoexamen frente a un espejo de cuerpo entero, así como uno de mano para las áreas difíciles de ver; deben examinarse todas las zonas incluyendo palmas de las manos, las plantas de los pies, la región lumbar y la parte posterior de las piernas aunque sean áreas poco expuestas al sol.
Asimismo invitó a acudir a las clínicas y unidades médicas del Seguro Social al detectar cualquier cambio en la piel, pues insistió en que si se detectan y diagnostican a tiempo, la mayoría de los casos son curables.
