Una fiesta del trabajo bajo fuertes medidas de seguridad en París
- Más de 7.400 policías y gendarmes están desplegados en París para las manifestaciones, donde se esperan entre 1.000 y 2.000 activistas radicales. Desde la madrugada, una veintena de policías comenzaron a registrar bolsos de forma aleatoria en los accesos de la estación de Saint-Lazare, en el centro de París.
Francia, 01 de mayo del 2019.- Ante el riesgo de incidentes por parte de manifestantes radicales, las tradicionales marchas del 1 de mayo en París, por lo general pacíficas y dedicadas a las reivindicaciones salariales, se llevan a cabo bajo fuertes medidas de seguridad y con numerosos negocios cerrados.
En total, 190 motos circularán cerca de las manifestaciones para permitir a las fuerzas de seguridad desplazarse rápidamente. También se utilizarán drones para vigilar el cortejo, precisó el ministro del Interior.
El presidente Macron reclamó el martes que la respuesta a estos «black blocs» –militantes anticapitalistas y antifascistas vestidos de negro y con la cara cubierta– sea «extremadamente firme» en caso de violencia, tras los llamados en las redes sociales a transformar París en la «capital de los disturbios».
El año pasado, 1.200 militantes radicales empañaron la manifestación parisina con violentos altercados: comercios vandalizados o incendiados, vehículos quemados…
Aunque están previstas manifestaciones en toda Francia, la atención se centra en la capital, a menudo escenario de espectaculares incidentes desde el inicio de las protestas de los «chalecos amarillos».
Este movimiento, que desde mediados de noviembre sale a la calle cada sábado para protestar contra la política social y fiscal del gobierno, también estará presente este miércoles.
A lo largo de los meses, el movimiento ha ido perdiendo fuelle al tiempo que se ha ido radicalizando, con altercados violentos al margen de las manifestaciones.
Los sindicatos tratan de hacerse escuchar
Atrapados entre los «blacks blocs» y los «chalecos amarillos», los sindicatos esperan recuperar visibilidad, a través de varios mítines y una gran manifestación a las 12H30 GMT, de Montparnasse a la plaza de Italia, en el sur de la capital.
«El 1 de mayo tiene que agrupar a todos los que se manifiestan desde hace meses y meses (…) para decir que se tiene que cambiar la política social», dijo Philippe Martinez, secretario general de la CGT, uno de los principales sindicatos franceses
El cortejo pasará delante del famoso restaurante de la Rotonde, un «símbolo» del poder desde que Emmanuel Macron celebró en él su paso a la segunda vuelta en las elecciones presidenciales en 2017.
Sus dueños admitieron el martes estar algo nerviosos, teniendo en cuenta como terminó el célebre Fouquet’s de los Campos Elíseos, saqueado y quemado, el 16 de marzo durante una manifestación de los «chalecos amarillos».
«No tenemos miedo de las cortejos sindicales sino de los ‘chalecos amarillos’ y los ‘blacks blocs'», explicó Serge Tafanel, cuyo restaurante permanecerá cerrado por pedido de la policía, como todos los comercios situados en el recorrido de la marcha.
Con información de: http://es.rfi.fr/