Zimapenses dan último Adiós al activista Salvador García
Pachuca, Hidalgo a 17 de diciembre de 2018
- Víctor Guerrero propondrá que Medalla Miguel Hidalgo y Costilla sea entregada post mortem
Cientos de vecinos de Zimapán dieron el último adiós al activista Salvador García, principal opositor de la instalación de la criminal planta de confinamiento de desechos tóxicos de la empresa española Abengoa-Befesa.
Salvador García falleció de un repentino ataque al corazón la mañana del sábado; fue sepultado la tarde del domingo en el panteón de Santiago, de la localidad Plutarco Elías Calles de Zimapán.
Al término de la misa de cuerpo presente en la iglesia de San Juan Bautista del centro de la cabecera de Zimapán, el féretro con sus restos mortales fue llevado al panteón de Santiago. El féretro iba en la parte posterior de una carroza fúnebre acompañada por una procesión de cientos de personas que la iban acompañando a pie.
Algunos llevaban cartulinas con leyendas de agradecimiento a Salvador García por haber encabezado un movimiento social que además de evitar el depósito de desechos tóxicos, logró que por primera vez en la historia del municipio el pueblo zimapense se uniera en una causa común: la defensa ambiental.
«¡Es un honor, estar con Salvador!» Fue la consigna que los activistas que acompañaron a «Don Chava» hasta su última morada gritaron durante la procesión, en analogía al saludo que Salvador García brindaba al ya hoy presidente de la república Andrés Manuel López Obrador cuando visitaba esa región de la Sierra Gorda hidalguense para informar al pueblo sobre los excesos de la mafia del poder.
Hace dos semanas, el primero de diciembre, fue día de fiesta en cada de don Salvador por la llegada de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México.
Ese día don Salvador, con una sonrisa de felicidad, agradeció a Dios que por fin nuestro país tenga un mandatario que lucha y trabaja por el bienestar del pueblo.
Víctor Guerrero Trejo, diputado local por Morena por el distrito 01 de Zimapán tras destacar que a diferencia de otros que inicialmente apoyaron la lucha contra el confinamiento pero que al final se corrompierón, Salvador García mantuvo intactos sus ideales, viviendo modestamente de su trabajo como abogado litigante y quien nunca aceptó sobornos ni ofrecimientos de cargos públicos ofrecidos por quienes tenían interés de que se instalará la planta de confinamiento.
«No vendió la lucha y logró que la planta de confinamiento fuera definitivamente clausurada en 2012», explicó Víctor Guerrero.
Por ello, el legislador dijo que el próximo martes solicitará ante la tribuna de la 64 legislatura local que el próximo año la Medalla Miguel Hidalgo y Costilla sea otorgada post mortem a Salvador García y que en el kiosko del centro de Zimapán y que fue el lugar de reunión y de movilizaciones contra la planta confinadora de desechos tóxicos, sea colocada una placa conmemorativa en su recuerdo.