Miami, 7 de agosto del 2018.- Nikolas Cruz, autor de la masacre de la preparatoria Marjorie Stoneman Douglas de Florida, dijo en su confesión hecha pública por primera vez, que escuchó voces de “demonios” y pidió a la policía que lo mataran tras la matanza del pasado 14 de febrero.
“No me lo merezco… Mátame. Solo mátame”, le dijo Cruz al oficial en su confesión mientras estaba solo en una sala de entrevistas en la que era grabado en video.
Cruz, de 19 años de edad, dijo que había estado oyendo una voz o demonios hablando con él durante años, hasta la mañana y la noche anterior de la masacre que dejó 17 personas muertas, una de las peores en una escuela de Estados Unidos.
Confesó que comenzó a escuchar las voces “de un hombre joven” luego de que su padre murió cuando era pequeño y que había empeorado desde que su madre murió en noviembre, tres meses antes del tiroteo.
“Quemar, matar, destruir”, decía la voz “malvada” le dijo Cruz al oficial entrevistador y señaló que también le pidió que comprara un arma y lastimara a la gente, pero no sugirió víctimas específicas.
Cruz indicó además que dos o tres semanas antes de la masacre, había planeado ir a un parque y disparar a la gente allí, pero no lo hizo y no pudo explicar por qué, pero más tarde se describió a sí mismo como un “cobarde”.
Una parte de las confesiones sobre la masacre de 17 personas fue liberada el lunes por la tarde por la Oficina del Fiscal del Estado en el Condado de Broward.
La transcripción de 216 páginas incluye 30 completamente oscurecidas y otras 50 que están parcialmente censuradas, mientras el video de la entrevista será liberado este martes.
La declaración inculpatoria de Cruz fue grabada en video unas horas después del tiroteo del pasado “Día de San Valentín” en la preparatoria de Parkland.
Cruz ha admitido que fue al campus de la escuela con un rifle AR-15, y dio muerte a 17 personas y lesionó a otras 17. Dijo que compró la pistola para “sentirse seguro”.
“Fantástico” dijo Cruz cuando el detective entrevistador le preguntó por qué compró el rifle AR-15 adquirido legalmente que usó en el ataque en la escuela.
El arma cuesta alrededor de 560 dólares. La munición, dijo, la compró a través de internet. Estimó que había gastado unos cuatro mil dólares en sus armas y municiones. Cruz trabajaba en una tienda y había heredado algo de dinero de su madre.
Al parecer, Cruz mostró cierto remordimiento durante la entrevista, aunque sus palabras específicas están oscurecidas porque la juez estima que no tendría un juicio justo.
Cruz, quien había sido expulsado de la escuela de Parkland por su mala conducta y luego regresó para realizar la masacre, enfrenta la pena de muerte si es declarado culpable de 17 cargos de homicidio en primer grado durante su juicio.
Los abogados de Cruz han ofrecido que se declare culpable a cambio de una cadena perpetua.
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