México, 19 de julio del 2018.- El investigador del Departamento de Química del Cinvestav, Jesús Armando Luján, junto con su colega de la Universidad Drexel, Fraser Fleming, obtuvo la patente en torno a un proceso de preparación de moléculas complejas.
Consiste en un desarrollo para la preparación de diferentes moléculas, empleadas como “bloques de construcción” para la generación de estructuras químicas más complejas que pueden emplearse en diversas industrias, entre ellas la farmacéutica, destacó en un comunicado el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav).
Las investigaciones se llevaron a cabo durante la estancia posdoctoral de Luján Montelongo en la Universidad Duquesne, en Pittsburgh, y así lograron la aprobación de la patente 9908846, por parte de la Oficina de Patentes y Marcas Registradas del Gobierno de Estados Unidos.
Luján Montelongo destacó que una de las cualidades es que los bloques de construcción molecular están estructurados con un grupo común de isonitrilo, y lo complementa otro basado en azufre que les confiere reactividad muy especial.
“Si bien existen moléculas con dicha cualidad estructural, nuestro desarrollo tecnológico habilita el acceso a moléculas con características muy especiales que pueden ser aprovechadas en procesos sintéticos diferentes y complementarios”, explicó.
Los isonitrilos son compuestos químicos que tienen una composición básica entre un átomo de nitrógeno y otro de carbono, pero su unión se da a través de este último elemento con el resto de la molécula.
Luján Montelongo inició la investigación sobre isonitrilos durante su estancia en la Universidad Duquesne y posteriormente la adoptó como parte de sus líneas de estudio en el Cinvestav.
“En Cinvestav estamos diseñando, construyendo y probando nuevos bloques de construcción inspirados en compuesto (isocianometil)(2-metoxifenil) sulfano, dando lugar a sustancias enantioméricamente puras, lo cual es de suma importancia para la industria farmacéutica, entre otras”, señaló el investigador.
Para realizar este trabajo cuenta con el apoyo de los estudiantes de doctorado del Cinvestav, Carolina Silva y Adrián Valle, así como Erika Cortés y Ángel Salazar, estudiantes de licenciatura del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
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