Sus manos materializan a la luz…

 

Aquí el tiempo se vuelve tiempo…

En cada detalle se observa la sabiduría acumulada

Y Cada pieza nos envuelve con el  aroma de los siglos de conocimiento depositados en ella.

Aquí la madera es más madera. Y el barro; materia prima de donde surgió la vida, las manos de los artesanos lo convierten en síntesis de la belleza.

No son piezas decorativas.

Son obras de arte que cantan, que hablan, que vienen acompañadas del viento que nos dan su palabra y nos hacen tibia la mirada.

Vienen del monte, de la sierra, del agua, del carrizo, de los caminos de terracería, vienen de donde vienen. De todas partes… De allá de donde el ser humano vive a imagen y semejanza del  creador… y crea.

Las manos de mujeres y hombres que nos reciben en ésta 4ª. Expo de los pueblos indígenas han atrapado el color y le han dado forma. ¡han materializado a la luz!

Con su inspiración le dan vida y forma a los sentimientos y virtudes.

En los huipiles nos enseñan y valoramos la paciencia. La paciencia que en ellos es verbo para avanzar tejiendo con esas manos que cantan y encantan.

Nos enseñan que la labor para dar forma y contenido a sus piezas, no es sacrificio. Es vocación por lo bello.

Nos dan muestra de su capacidad de empatía al fundir, sin confundir, a la pintura con la madera, con los metales, con las piedras.

Sus manos maestras nos muestran su respeto al abuelo fuego y a la consciencia del ser mismo, del yo…

Sus manos hablan y pintan… todo lo decoran a mano limpia…

El bronce, la roca, tan recios de por sí, el talento y manos indígenas los hacen maleables, amables. Lo trabajan desbordados de esperanza. Los suavizan con lumbre. Por ello en las noches de invierno sus  casas humean. Hay calor y hay color.

¡Que bello jaguar…! ¡que bellos pájaros! ¡la chaquira huichol! ¡la brillosa lentejuela!, los alebrijes!!!, la concha de abulón, el queshquemen. Los sombreros, los tenangos de Hidalgo, las pulseras y brazaletes, las muñecas sonrientes de Querétaro, las esferas de Chignahuapan, la sonrisa de la gente y el asombro de todos, Porque todo es arte en esta 4ª. Expo.

Un universo multiforme en el pleno corazón de la ciudad más grande del mundo.

Aquí están los pueblos indígenas conquistando el corazón de todos.

Si…  comenzó como una idea –nos dicen- y lo sabemos.

Una idea que prospero, porque sembrada fue en tierra fértil y fecunda.

Había que colocar en el lugar que le correspondía a la artesanía indígena.

Evitar que se le viera como una parte adjunta al mercado vacacional

Lograr que se le considerara –a la artesanía indígena- como artículo de uso diario y no solo ornamental.

Suprimir la idea de que el artesano está sujeto al precio que le brinda el regateo del comprador.

Valorar el tiempo y esfuerzo que se invierte en cada pieza

Había que darle un espacio para la exposición de su arte.

Comprender todos que las y los artesanos no estaban destinados al ambulantaje.

Que podían lograr ser micro empresarios

Que podían facturar y pagar impuestos

Que podían competir en mercados internacionales

Que podían vender con sus marcas propias.

Que podían vivir dignamente y crear empleos con su artesanía.

Se está logrando.

Nuvia Mayorga, tuvo esa primer idea…

¡manos a la obra…!

Y hoy es una realidad.

Ya hay dos marcas registradas. “Manos Indígenas, Calidad Mexicana” y “Paraísos Indígenas”

Y es tal la demanda que en breve tiempo, no lo dudemos, la venta de artesanías y servicios,  será por línea y ¡en subasta!

No tarda…

Mientras tanto. Hagamos un recorrido por la 4ª. Expo de los Pueblos Indígenas en Expo Reforma en la CDMX.

Ahí nos esperan; la joyería más delicada, las pieles mejor curtidas, la medicina tradicional con sus sabios curanderos, las piedras de ónix, el intrigante ámbar, el bronce cóncavo, los finos sombreros, las hermosas vajillas, las estatuas de palo-fierro, los nacimientos de ixtle, originales textiles, los caminos de mesa, las flores de nochebuena, las cactáceas…

Y todos, hermanémonos con los pueblos totonacos, Huicholes, Mazahuas, Hña Hñus, Rarámuris, Mazatecos, Zoques, Nahuas…

Y recordemos que cada obra que los pueblos indígenas realizan, las hacen bajo el amparo de lo sagrado…

Ya descubrimos su otro secreto…

Todo lo realizan… con la mejor de sus sonrisas…

No se pierdan el privilegio de decir…

“Yo estuve ahí… en la 4ª. Expo de los pueblos indígenas y tome las manos de grandes artistas…”

Manos que acarician y que  al tiempo lo vuelven más tiempo…