- La ley mandata que en obras que tengan impacto sobre comunidades indígenas, se lleve a cabo una consulta previa, libre e informada entre dichos pueblos.
Las asambleas se llevaron a cabo en 15 micro regiones de los cinco estados del sureste del país por donde correrá la ruta y culminaron el 30 de noviembre, según un comunicado. Las asambleas se llevaron a cabo en dos jornadas.
La ley mandata que en obras que tengan impacto sobre comunidades indígenas, se lleve a cabo una consulta previa, libre e informada entre dichos pueblos. En este caso el proceso se realiza entre indígenas mayas, tseltales, ch’oles, tsotsiles y otros de los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
También se discutieron temas como impacto ambiental, conservación y difusión del patrimonio cultural y de la riqueza biocultural.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que si los pueblos indígenas rechazan la obra, ésta no se realizará. Aunque en agosto se licitó el primer contrato, correspondiente a la ingeniería básica del proyecto. Desde entonces también se han adjudicado contratos para llevar a cabo estudios preliminares y conceptos arquitectónicos de diversas estaciones del tren y sus polos de desarrollo.
También se asignaron ya los correspondientes a los estudios de capacidad de carga turística y de seguridad de la ruta.
Con información de: https://obrasweb.mx/
