La reunión del chocolate
Lo primero que recobró fue su sombra…
Eran tan oscura la cárcel, el calabozo que el hombre se había olvidado de ella… de su existencia… De su sombra…
De 1810 a 1837 estuvo preso
Un mexicano preso en Manila, Filipinas
Su delito; Conspirar contra el rey de España, contra el Virrey de la Nueva España y formar parte de los conjurados; Miguel Hidalgo y Costilla, Agustín de Iturbide, Josefa Ortíz de Dominguez, Juan Aldama, el Corregidor Miguel Domínguez y otros más.
Su nombre y tarea nos es recordado en ésta magistral novela de Luis Jorge Arnau.
Epigmenio González Flores
Así se llamaba… De oficio tendero, hombre respetable, callado y de buen trato, se involucra por invitación a las tertulias de la “Francia chiquita” en la casa del Lic. Juan Nepomuceno Mier y Altamirano, en donde conoce a los mencionados conjurados de Querétaro
Correspóndele a él -a Epigmenio- ser el acopiador de armas y fabricante de cartuchos.
¡El primer armero de la independencia!
Es precisamente a Epigmenio González y a su hermano Emeterio, quienes por la acusación de un traidor, son apresados y llevados a prisión, con lo que la conspiración es descubierta y se adelantan los acontecimientos.
El inicio de la revuelta estaba pensada para días más adelante.
La detención de Epigmenio se da el 14 septiembre de 1810
El grito independentista realizado por el cura de Dolores fue la mañana del 16 de septiembre de 1810.
Epigmenio fue a la cárcel… su hermano también..
Epigmenio espero siempre… y siempre pensó que los independentistas lo liberarían a él y a Emeterio… No sucedió… Emeterio murió poco después…
Epigmenio fue llevado a una cárcel de Acapulco
De ahí a Filipinas
Él no traicionó a nadie, ni a la causa ni a los involucrados. Un ser humano macizo
Estuvo prisionero 27 largos y oscuros años…
La independencia se logró en México en 1821
Epigmenio salió libre en 1837
Regresó a México en 1838
Los iniciadores del movimiento independentista; ¡Todos habían muerto…!
Y de él, del primer armero de la independencia de México… ¡nadie se acordaba…!
Y hasta donde recordamos nunca se ha vitoreado su nombre en la “noche del grito”
Parece ser un héroe olvidado, escondido, perdido…
Como seguramente los hay tantos…
Tan sonoro que será decir de ahora en adelante ¡Viva Epigmenio González Flores… Hombre pueblo!!!
Ojalá…
En fin, sale de prisión…
Epigmenio González Flores vive una vida grata al salir de la cárcel en Filipinas… tiene una compañera de vida, un amigo, calles por recorrer, el mar frente a él, las gaviotas, fruta fresca, pan suave y agua limpia, el horizonte sin embargo; lo reta… “México… mi país… mi patria” balbucea…
¿Por qué regresa a México en donde nadie lo recuerda y él recuerda muy pocas cosas…?
¿Porque, para que…?
La novela de Luis Jorge Arnau, “La reunión del chocolate” nos da la respuesta
Es ésta una novela de grandes giros… llena de intensidad.
Es la vida de un tendero honesto que quiere una patria libre y las circunstancias lo convierten también, en el primer preso político Mexicano
¿lo olvidaron los independentisas? ¿Lo seguiremos ignorando..?
No lo merece.
“La reunión del chocolate” evita mas ahuecamientos.
Es un gran libro de la autoría de Luis Jorge Arnau de la Editorial Paralelo 21. Conaculta
Mientras tanto; ¡Que viva Epigmenio González Flores!
¡Si señor…!