«Reconozcamos la verdadera naturaleza de la beneficencia:
una empresa noble, encaminada a mejorar la condición de las personas.
En este Día Internacional, hago un llamamiento a las personas de
todo el mundo para que se dejen llevar por ese impulso benefactor
que todos los seres humanos llevamos dentro, para que
comiencen a dar y continúen haciéndolo«
Ban Ki-moon
Secretario General de las Naciones Unidas
2014
La Asamblea General de las Naciones Unidas designo en su resolución A/RES/67/105 el 5 de septiembre como Día Internacional de la Beneficencia, para conmemorar el aniversario de la muerte de la Madre Teresa de Calcuta. Asimismo, en reconocimiento del papel de las organizaciones de beneficencia y de los particulares en su labor de caridad y de mitigación del sufrimiento humano
Este día fue establecido con el objetivo de ayudar a sensibilizar y movilizar a las personas, a las organizaciones no gubernamentales y a los grupos interesados de todo el mundo en ayudar a los demás a través de actividades voluntarias y filantrópicas.
La beneficencia es un valor que puede adoptar múltiples formas: desde la aportación voluntaria de tiempo y conocimientos, hasta las simples donaciones económicas o en especie realizadas por particulares, empresas o fundaciones filantrópicas
También, puede contribuir a la promoción del diálogo entre personas de diferentes civilizaciones, culturas y religiones, así como de la solidaridad y la comprensión mutua
Igualmente, constituye una verdadera vinculación social y contribuye a la creación de sociedades inclusivas y más resistentes
Del mismo modo, la beneficencia puede aliviar los peores efectos de las crisis humanitarias, complementar los servicios públicos de atención de la salud, la educación, la vivienda y la protección de la infancia. Ayuda a la promoción de la cultura, la ciencia, el deporte y la protección del patrimonio cultural y natural; promueve los derechos de los marginados y de los desfavorecidos y difunde el mensaje de la humanidad en situaciones de conflicto
Cabe decir, que el Programa de Voluntarios de las Naciones Unidas ofrece medios para la participación de las personas de todo el mundo al impulsar la paz y el desarrollo a través de la movilización de más de 7,5000 voluntarios a nivel nacional o internacional en 140 países
En un contexto de graves restricciones fiscales y presupuestarias, la beneficencia cobra aún más importancia en las iniciativas mundiales destinadas a alcanzar los Objetivos de Desarrollo del Milenio[9]. Para estos objetivos, se fijaron metas con plazos determinados, mediante las cuales se pueden medir los progresos en lo tocante a la reducción de la pobreza económica, el hambre, la enfermedad, la falta de vivienda adecuada y la exclusión
